Ingredientes:
- Una barra de pan – yo he usado el pan de molde
especial de torrijas que venden en Mercadona –.
- 150 ml. de vino moscatel.
- 3 cucharadas soperas rasas de azúcar.
- 400 ml. de leche.
- 2 huevos.
- Aceite de girasol para freír las torrijas.
- 150 ml. de miel.
- 150 ml. de agua.
Elaboración:
1. Poner el
vino en un cazo al fuego y cuando rompa a hervir añade el azúcar y remover para
que se disuelva dejarlo un minuto y apartar del fuego.
2. Echar la
leche en el vino remover y verterlo en una fuente.
3. Ir poniendo
las torrijas en la fuente por tandas e ir dándoles la vuelta y dejar en otra
fuente para que vayan soltando la leche que hayan absorbido de más.
4. Batir los huevos.
5. Calentar el
aceite en una sartén.
6. Cuando el
aceite haya cogido temperatura, ir pasando las torrijas por el huevo y a la
sartén.
7. Cuando hayan
cogido color por una cara darles la vuelta con unas pinzas y cuando estén ir poniendo en una fuente con
papel para que absorba el aceite.
8. Cuando
hayamos frito todas poner al fuego en un cazo la miel y el agua y remover hasta
que la miel se haya disuelto, dejamos en el fuego y vamos bañando las torrijas
por ambas caras, las dejamos un minutillo más o menos y vamos sacándolas a una
fuente.
9. Cuando
hayamos bañado la última tanda, la miel que haya quedado en el cazo la vertemos
por encima de las torrijas.
10. Y lista para
comer – cuando se hayan enfriado –.
Notas:
- El pan tiene que ser de uno o dos
días ya que si no al bañarlo en la leche se deshace, aunque este es especial
para torrijas y no hay que esperar.
- A la leche se le puede poner canela,
vainilla, la piel de un limón, naranja, etc…, yo en este caso he optado por
ponerle el vino, pero nunca mojar el pan con la leche caliente ya que podría
deshacerse, por ejemplo la calentamos con la ramita de canela, naranja y azúcar
y dejamos enfriar.
-
Yo las he
frito en aceite de girasol, para evitar que al freírla haga espuma.
-
Están
riquísimas, os las recomiendo.
Besitos.
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